Los conductores finos se utilizan mayoritariamente en la industria microelectrónica. Estos conductores se utilizan para realizar interconexiones entre circuitos integrados y circuitos impresos. La mayoría de estos conductores tienen un diámetro inferior a 50um y sus características mecánicas son cruciales para asegurar un correcto funcionamiento.
Los ensayos de tracción sirven para evaluar la fuerza de rotura, el punto de fluencia y la elongación. Cuando se ensayan estos hilos tan finos resulta difícil obtener una correcta configuración del sistema. Las mordazas deben ser capaces de sujetar la probeta correctamente sin que resbale y sin producir daños. La presión de cierre de las mordazas tiene que estar perfectamente controlada para evitar roturas prematuras. Algunos clientes utilizan cartón para fijar los extremos de los hilos y así obtener mejor alineamiento y más superficie de agarre.
Hemos realizado un ensayo sobre hilos de 20um de diámetro utilizando uno de nuestros equipos electromecánicos de sobremesa equipado con unas mordazas neumáticas de 10N y software Bluehill. Se añadió cartón en los extremos del hilo para poder fijarlos en la mordaza. Como las cargas de rotura son muy bajas, es recomendable utilizar una célula de carga de 10N o menos. Para maximizar el rango de trabajo de la célula es recomendable que el peso de la mordaza no exceda del 50% de la capacidad de la misma. Nuestras mordazas son muy ligeras y las mandíbulas tienen una cobertura especial para evitar el deslizamiento. Las bajas cargas esperadas implican que los resultados pueden ser sensibles al ruido ambiental. Por esta razón, para obtener resultados correctos, es crítico que la zona de ensayo esté libre de fuentes de error, tales como viento o vibraciones.